Así lo expresó Horacio Heredia, bioquímico diplomado en toxicología.

Los lamentables sucesos ocurridos la semana pasada en la provincia de Buenos Aires, donde murieron 24 personas luego de consumir cocaína adulterada con un opioide 10.000 veces más fuerte que otras sustancias como la heroína y el fentanilo, acentuó la preocupación de la comunidad médica por las consecuencias cada vez más graves del consumo de drogas.
La desmedida ambición narco por generar más dinero, hace que «estiren» la droga con todo tipo de sustancias, algunas de ellas letales. En este sentido, el doctor Horacio Heredia, bioquímico diplomado en Toxicología, y responsable del Laboratorio de Toxicología del Ministerio Público Fiscal de Santiago del Estero, reveló que, lamentablemente, «con un gramo de cocaína pueden llegar a hacer diez gramos, para tener un mayor rédito económico». El especialista reveló que en esa provincia se llegó a determinar que para estirar la droga, «se emplea desde azúcar hasta un antiparasitario de uso veterinario, muy tóxico para los humanos». «La cocaína nunca está pura, generalmente los narcos le ponen cualquier polvo blanco, algunos de ellos no causan ningún efecto, pero otros si, como la cafeína, que ayuda a que la droga tenga un mayor efecto, pero el resto es sólo para sacar más provecho, porque con un gramo de cocaína pueden llegar a hacer diez gramos, y tienen mayor rédito económico. Habitualmente, en la provincia lo que vemos en los análisis es cafeína, lo más común, dipironas, creatina, algo que también usan mucho los fisicoculturistas, algunos azúcares, y el Levamisol, que es un antiparasitario de uso veterinario muy toxico para el ser humano, aspirinas y ácido bórico», reveló. El doctor Heredia comentó respecto del trabajo que se desarrolla en el laboratorio que dirige, que «normalmente» se analiza droga que «tiene una serie de contaminantes». «Nosotros lo primero que hacemos en el laboratorio es determinar si realmente se trata de cocaína, y luego determinamos con qué está acompañada. En muchos casos, hay sustancias, como la utilizada en la droga que mató a esas personas, que se emplea en muy poca cantidad, lo que hace muy difícil llegar a detectarla en un primer análisis», precisó. En referencia a las 24 personas que perdieron la vida luego de consumir la cocaína envenenada en Buenos Aires, el doctor Heredia, consideró que esa mezcla ha hecho que recibieran «una dosis gigante». «Para el tratamiento inmediato de estas personas, en el hospital se empleó un antídoto genérico que actúa ante el fentanilo, y al ver que respondieron a ese tratamiento, tuvieron una pista para investigar en los análisis de laboratorio. Ocurre que como se emplean cantidades muy bajas, no es fácil detectarlo, y los estudios finales determinaron que se trató de carfentanilo», precisó. Dijo que esta sustancia no es de uso en seres humanos, y que la mezcla produjo una «tremenda sobredosis». Respecto del carfetanilo, la sustancia con la que se envenenó la cocaína hallada en Puerta 8, el doctor Heredia explicó que se trata de un “opioide muy dañino” que habitualmente no se usa en los seres humanos, es de uso veterinario y para sedar a animales de gran porte, como los elefantes. “Todos los opioides en general, como la morfina o la heroína, son drogas que tienen un efecto psicotrópico, y algunos se usan en medicina como tranquilizantes. También se usan de modo ilegal y han causado muertes en todo el mundo, ya en Estados Unidos han tenido problemas con el fentanilo, que son drogas muy potentes que ocasionan una sobredosis muy grande al consumidor”, amplió. Dijo que estos, “mezclados con la cocaína producen una sobredosis, por eso es que el consumidor cae muerto, por eso son tan pequeñas las cantidades que se ponen, que es muy difícil detectarlas en el laboratorio, y al consumirlas se le diluyen en el cuerpo y es difícil luego determinarlas”. /El Liberal