Por los historiadores Daniel Guzmán Alcaraz y Gustavo Varela

Este especial aniversario de la recuperación de Malvinas nos encuentra en un ámbito internacional muy convulsionado y raro. El contexto actual es diferente al de hace 40 años, a las potencias existentes se le suman otros jugadores con ambiciones globales o regionales. Da la sensación que estamos entrando desde hace unos años en una etapa de alineación con las viejas y nuevas potencias. Frente a todo esto se suma situaciones que hace años no tenían relevancia como el factor ambiental, sobre todo el cambio climático y sus consecuencias a futuro. Debemos recordar que la Antártida es un continente y que aparentemente contiene ingentes cantidades de recursos naturales muy valiosos y estratégicos. En un mundo ávido de energía y materiales escasos para desarrollo de nuevas tecnologías se convertirá en un objetivo prioritario para las potencias, sobre todo para las emergentes como China. Entonces veremos como la doctrina de seguridad que atañe a la geopolítica empezara a mirar al atlántico sur como mira al canal de Panamá, una llave estratégica entre los dos océanos y el comercio mundial. Salvando las diferencias, Malvinas y las Islas Georgia serán el pivote de entrada a la Antártida. Quien posea esa llave garantizara a occidente el acceso a esa región del mundo que se tornara vital.
Estamos en una etapa de reacomodamiento geopolítico a nivel mundial de grandes proporciones. La invasión rusa a Ucrania a disparado muchos interrogantes: para citar algunos, tenemos la problemática de la soberanía territorial, las poblaciones y sus raíces identitarias, las relaciones económicas y la pertenencia a bloques culturales en continuo movimiento.
Lo cierto es que el tema Malvinas, se reposiciona atravesado por los factores citados y una constante serie de recordatorios y relatos históricos, que nos llevan al pasado, para volver a plantearnos que no es sólo homenajes, sino también una cuestión histórica que cada vez se visibiliza más. Son numerosos los libros, las conferencias, las mesas panel y los artículos que forman una rica masa de antecedentes, para todo aquel que esté interesado en investigar aquella época.
En este sentido, el Atlántico sur en estos días es noticia, pues como dijimos, la guerra en Ucrania ya es planetaria. La OTAN proyecta ejercicios en sus bases marítimas y es muy posible que Malvinas, se convierta en una base importante, en miras de un posible choque con los rusos. Pues estos, también están movilizando sus barcos por todos los mares.
Y en ese plano, a pesar de que ha cambiado la coyuntura, Malvinas, sigue y seguirá ocupando un lugar central en nuestra memoria histórica.