Revistas del Interior: Disipando Sombra (1924/1929)

Escribe el historiador Prof. Daniel Guzmán para Periódico Nuevo Santiago

El interior santiagueño tempranamente comenzó a elaborar sus propuestas culturales. Y en ese plano, la revista Disipando Sombras (1924/1929), es un ejemplo de ello.


Dirigida por Segundo Osorio, docente y organizador cultural, difundió sus páginas no sólo en la Capital y la Banda, sino en Pellegrini, Copo y Alberdi, es decir la zona norte de la provincia.
En Añatuya deportiva y social la revista Disipando Sombras, fue vista como una empresa progresista, por ello fue alentada desde Añatuya: “Predicando virtud, enseñando moral seguid adelante sin preocuparos de la evidencia de que no os
interpretan como anheláis que importa si entre cien lectores, diez escuchan, cinco analizan, tres comprenden medianamente, y uno solo, uno asimila el bien que le brindáis, no importa, nobles luchadores” (…)

Las revistas en aquella época, fueron unas de las formas de
comunicación que tuvo el interior, en este caso el norte con
el sur santiagueño. Por lo tanto Disipando Sombras fue una
revista hermana para ADYS, por ello dice su propaganda:
nació en estación 7 de abril defensora de los departamentos
del norte de Santiago, y dirigida por nuestro hermano
espiritual el joven Segundo Osorio, colaborador de la revista,
y calificó a los gestores de la empresa, idealistas y a esta
civilizadora.

DS, fue una revista, que ligo las tareas de civilización de la región, a la escuela, el maestro, el libro y la biblioteca popular. Entre sus colaboradores estuvieron: el abogado Arturo Bustos Navarro, los docentes Ramón Carillo, Antenor Ferreyra, Felipe Singer, Domingo Maidana y el médico Antenor Álvarez. Otro fin de la revista fue contribuir a la cultura pública y al progreso general de los Copos, así el Departamento Pellegrini tuvo su medio de difusión e información de toda la zona circundante. Su equipo estuvo formado por docentes y la revista se vendió mediante suscripciones. Este proyecto fue bien recibido por la prensa local, quien lo definió como un “deseo de renovación intelectual” para el interior provincial. La revista apoyo la política provincial de reglamentar el juego y la portación de armas y siempre bregó por la comunicación entre los distintos parajes del norte santiagueño.

En 1928 luego de un lapso de silencio la revista salió de nuevo, esta vez fue hecha en los talleres gráficos del diario El Pueblo de Santiago del Estero. Y se hizo eco del movimiento asociacionista que sacudió a la ciudad Capital desde el año 1925 y que en 1928 ya impacto a todo el interior. Por ello se publicó como un grupo de docentes y vecinos constituyeron la Asociación Pro-fomento y cultura de Pellegrini. En 1929 el núcleo de docentes de Los Copos, mantuvo mucho contacto a través de la revista con un grupo de Termas de Rio Hondo, que tuvo la idea de repetir el proyecto de sus colegas del Norte. Felipe Singer, uno de los docentes de Termas mando el siguiente saludo a DS: “Vivamos la vida de inquietud y revolución”. En 1929 la revista mediante gestiones logro interesar a los poderes públicos sobre obras de infraestructura necesarias para la zona. Y logro formar parte de una red de revistas que mantuvieron a los dptos provinciales, comunicados e informados de toda la problemática local. Visibilizando una serie de necesidades y actividades que fueron pregonadas por un conjunto de docentes que hicieron de estas publicaciones, una importante nexo con la comunidad de cada localidad.