Vendiendo churros le pagó la universidad a su nieta, y ella logró recibirse de abogada

Una de las noticias que emocionó a los santiagueños fue el hecho de conocer a Laura Argañaráz, una jovencita con un objetivo marcado que logró alcanzar gracias al esfuerzo y arduo trabajo de su abuelo, que vendiendo churros en la zona del Parque Aguirre ha podido pagar matrícula y cuotas de la carrera de abogacía.

Laura alcanzó su meta, se convirtió en abogada y se siente orgullosa de su lucha y la de su abuelo, agradeció a través de un emotivo mensaje por las redes sociales, la confianza depositada en ella y en las aspiración personal que tiene para su vida.

«ABUELO Muchas gracias por todo, por confiar en mi, por cada esfuerzo que hiciste para solventar mis estudios», comenzó escribiendo en su facebook.

«Gracias por tanto amor, por tanta lucha. Valoro tu fuerza, tu dedicación para salir adelante, y  desde tu humilde carrito de churros que tanto amas me hiciste estudiar, aún con dolor ibas a trabajar para darme un futuro mejor, para costear cada matricula, cada cuota, para que pueda conseguir mi título como sea, al costo que sea», continuó Laura a quien sin duda emocionó a todos los usuarios de Facebook quienes compartieron su historia y resaltaron el sacrificio de su abuelo para con su nieta.

«No me alcanzan las palabras para agradecerte, estuviste hasta en los últimos detalles para que el festejo sea a lo grande, sentías que me lo merecía. Soy ABOGADA gracias a Él», finalizó.